Al juez Jorge Luis Lubo Sprockel no le gustan las obras para los pobres

Lucia Bastidas Concejal 

Curioso. El juez que acaba de suspender la adjudicación de la licitación de TransMilenio por la carrera 7ª es el mismo que en el 2015 le suspendió al alcalde Gustavo Petro el proyecto de construir 300 viviendas de interés prioritario en predios de estratos altos en el norte de Bogotá.

 Es Jorge Luis Lubo Sprockel, que en el 2015 era juez 26 administrativo de oralidad de Bogotá, y hoy es el juez 49 administrativo de oralidad de Bogotá. Parece que no le gustan las obras para pobres en zonas de estrato alto.

En el 2015, el alcalde quería construir viviendas de interés prioritario en zonas como Chicó Lago, Virrey, Santa Bárbara y El Refugio, estratos altos del norte de la ciudad. El juez apoyó a quienes no les gustaba que se llevara vivienda para pobres al norte de la ciudad.

Hoy, en el 2019, la administración quiere construir una troncal de TransMilenio para mejorar la movilidad de los pobres, que son los que usan el servicio, y dentro del proyecto hay dos puentes que buscan destrabar la movilidad del norte en el cruce de la avenida Circunvalar, la carrera 7ª y la calle 85.

El juez se puso del lado del conjunto Altos de la Cabrera, de estrato alto, para decir que se suspenda la licitación porque los dos puentes los van afectar. El juez ignoró que ese conjunto se construyó en parte del terrero que fue declarado de reserva vial y son ellos mismos los causantes de que hoy la solución vial les quede cerca de los edificios.

Ellos son de estrato alto, y los que usarán TransMilenio son los pobres. Esos que no le importan al juez.

Muy curioso, que dos fallos coincidan de esta manera: se niegan obras que se quieren hacer en estratos altos para beneficiar a los pobres.

Al juez Jorge Luis Lubo Sprockel no le gustan las obras para los pobres. Por lo menos en su despacho parecen siempre ganar los defensores de los intereses de las clases altas.