sobre la violencia política contra las mujeres en el proceso electoral de las elecciones regionales y locales del 27 Octubre de 2019

 

Como Comisión de Igualdad de Género y Empoderamiento de las Mujeres, queremos en primer lugar, reconocer los cambios logrados en la senda de igualdad de oportunidades y derechos para las mujeres dentro de la colectividad. Destacamos la representación en el Comité Nacional y, departamentales de avales donde tenemos la representación: los aportes financieros para algunas candidatas activas en las comisiones de igualdad de género nacional y departamentales; el respaldo a algunas candidaturas locales apoyadas de manera especial por esta comisión y la acción afirmativa de las tres delegadas del proceso de la comisión en las direcciones departamentales. En segundo lugar, expresar nuestro punto de vista y preocupaciones por el fenómeno creciente de la violencia política contra las mujeres que participan en la política.

La violencia política contra las mujeres es una forma de violencia de género que busca reducir los derechos de las mujeres a elegir y ser elegidas, y menoscabar su voz en la toma de decisiones a través de una serie de estrategias y acciones que limitan su participación política como activistas sociales, militantes de partidos políticos y candidatas a cargos de elección popular. Estas agresiones de género contra las mujeres por su condición de ser mujeres, y por ‘atreverse’ a incursionar en un campo tradicionalmente dominado por los hombres, se expresan en distintos actos tales como: descalificar las intervenciones y la voz de las mujeres; la intimidación a las lideresas políticas mediante amenazas verbales o simbólicas; difamar y propagar rumores para que las mujeres renuncien a sus candidaturas; inducir a su aniquilamiento por parte de actores armados y hasta llegar a la eliminación física como el lamentable caso de Karina García, candidata a la Alcaldía de Suárez (Cauca).

Las violencia política contra las mujeres no se ejerce únicamente contra las candidatas durante el periodo electoral, sino también una vez electas, tal como lo demuestra el estudio publicado por el NIMD en marzo de 2017 donde el 63% de las entrevistadas (N=166) reconocieron haber sido víctimas de violencias.1 La forma mas prevalente fue la violencia sicológica, ejercida principalmente por sus colegas hombres, incluso del mismo partido, entre las cuales están: Trivialización de sus argumentos; amenazas contra sus hijos, hijas o familiares; rumores de infidelidad; abuso físico y verbal; y más frecuente aún, silenciar sus voces en las sesiones legislativas, apagando el micrófono. Desde el inicio de esta campaña electoral en agosto de 2019 hemos observado ultrajes y vejámenes contra candidatas a cargos uninominales y a corporaciones públicas. Los casos de las candidatas a las alcaldías de Patía, Rosalbina Valdés y de Suarez, Karina García, en el Cauca son tristes ilustraciones de ello. Rosalbina fue agredida y verbalmente ‘descuartizada’ por un Representante a la Cámara del Cauca y sus afiches de campaña vandalizados con rayones en su rostro y destruidos. Con impotencia y repudio supimos del cruel asesinato de Karina García y sus acompañantes en Suárez, quien días antes había denunciado las calumnias sobre su campaña electoral y las amenazas sobre su vida.

Dichos señalamientos y afirmaciones descalificadoras y difamatorias que incitan al odio, aunado al envió de panfletos con amenazas de muerte, ponen en riesgo la vida de las candidatas e integrantes de sus equipos de campaña, especialmente en los municipios otrora afectados por el conflicto armado, hoy en manos de actores armados que se usufructúan de las economías ilegales. En este sentido como Comisión Nacional de Igualdad de Género y Empoderamiento de las Mujeres del Partido Alianza Verde, queremos llamar la atención ya que hemos sido testigas durante el periodo (pre) electoral, de los abusos de poder por parte de algunos lideres en diversas direcciones departamentales. Por ejemplo, a nuestras compañeras de las comisiones de género departamentales se les ha limitado su participación en el comité de avales, han debido asumir ‘pulsos’ para que se otorguen avales a candidatas fuertes, y también se ha denegado su participación como delegadas al VII Congreso Nacional de la Alianza Verde, como ha sido el caso entre otros, en Bolívar.

 Se han propagado rumores que se retiraría el aval a la candidata de la alcaldía de Medellín para menguar su confianza; tampoco le hacen campaña y la inducen a sumarse al candidato que tenían previsto para recomendar su aval y, hace dos semanas presenciamos por redes el trato abusivo y uso de calificativos sexistas denigrantes contra la concejala de Bogotá Lucía Bastidas por parte de un militante de Alianza Verde. La lista de mujeres políticas, víctimas de violencia verbal, simbólica y difamatoria es bastante larga en el territorio nacional. Como mujeres políticas que somos y como Comisión de Igualdad de Género que luchamos por la igualdad política y el aumento de la participación sustantiva de las mujeres en los procesos electorales y en los cargos de representación, manifestamos nuestro repudio a la violencia política contra las mujeres. Exigimos que se tomen medidas contundentes que nos garanticen el derecho constitucional del ejercicio de nuestra ciudadanía plena: votar y ser elegidas.

Exigimos que desde los partidos políticos se sancione a los autores de agresiones contra las mujeres y que desde la institucionalidad electoral (CNE, Registraduría) y la fiscalía se investigue los actos de violencia política y se juzgue y castigue a los perpetradores. Solicitamos a la MOE y a la sociedad civil denunciar dichos atropellos a la democracia y exigimos al Estado la implementación del Plan Nacional de Garantías Electorales, el Plan Ágora y el Plan Democracia2 que busca con 166.000 uniformados de la Fuerza Pública proteger a las y los candidatos que han sometido sus nombres al constituyente primario en la contienda electoral del 27 de Octubre de 2019. A nuestro partido, pedimos poner la atención debida de manera oportuna a los casos comentados y otros menos conocidos, estableciendo las alarmas y los correctivos necesarios y pertinentes. Los principios que nos rigen son claros al respecto.

 

Bogotá, 6 octubre de 2019, Comisión Nacional de Igualdad de Género y Empoderamiento de las Mujeres de la Alianza Verde; Sofi Ospina, Rocío Pineda, Angélica Gómez y Marcela Clavijo.